Os saldrán muy ricas y con muy poco trabajo, yo las hice de arándanos aunque se pueden hacer con cualquier fruta deshidratada.
Ingredientes:
150 grs de harina
160 grs de copos de avena
170 grs de mantequilla
1 Huevos
90 grs de azúcar de caña o panela
50 grs de azúcar blanco
115 grs de arándanos deshidratados
1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
Preparación:
Tamizo la harina con el bicarbonato. Añado los copos de avena. Reservo.
Bato la mantequilla, que estará a temperatura ambiente, con los dos tipos de azúcar hasta que estén integrados y la mezcla sea muy cremosa. Incorporo el huevo y sigo batiendo.
Añado la mezcla de harina y copos que tengo reservada, mezclo todo bien e incorporo la fruta deshidratada picada.
Enfrío en la nevera 20 o 30 minutos.
Preparo 2 bandejas de horno con papel vegetal.
Hago bolas no muy grandes y las coloco espaciadas sobre la bandeja, aplastándolas un poquito.
Las horneo a 180 grados unos 12 minutos o hasta que se vean doradas por los bordes. Dejo que se templen en la bandeja y luego las paso a una rejilla para que se enfríen por completo.
Estas galletas también se pueden hacer con manzana deshidratada y un poco de canela, de hecho, así era la receta original que me pasó Ana.
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